miércoles, 12 de octubre de 2022

Jaulas de hormigón

 


Nuestra propia casa se puede convertir, por diversos motivos, en un espacio feo y claustrofóbico, que nos atenaza, nos tortura, nos acongoja o nos erosiona. De tal forma que lo que debería constituir nuestro paraíso se convierte en nuestro más insoportable infierno. De esa manera se sienten los protagonistas de este libro de relatos que la madrileña Mayte Blasco publicó en 2021 en el sello Niña Loba; y así lo perciben también los lectores, gracias a la notable habilidad con la que están concebidos y redactados estos diez cuentos. Así, sentimos la angustia impotente de un hombre que permanece en estado vegetativo sobre una cama, mientras su mujer acumula contra él desdenes y gemidos sexuales con su amante; notamos la decepción de una madre que comprende que su hijo se desvía sin remedio por un sendero de rebeldía y delincuencia; asistimos al juego de seducción que establece Dani desde su ordenador con una mujer casada, que parece dispuesta a zanjar su matrimonio por su culpa; compartimos el vacío que siente una mujer que se sabe no deseada por su marido, y para la cual la casa se ha convertido en una ratonera insufrible; o advertimos que el pulso se nos acelera cuando la protagonista de otro de los relatos constata por la ventana que está siendo observada, acechada y muy posiblemente amenazada por un hombre malencarado que, quizá, terminará por subir hasta su vivienda.

Todos los protagonistas experimentan la infelicidad y notan cómo el gorgojo del dolor los va royendo sin misericordia, precisamente en un espacio (sus propias casas) donde sería esperable que las defensas se puedan relajar. Pero no es así. De un modo sartreano, todos ellos descubren que el infierno son los demás; y que puede haber un enemigo en cada persona que se nos acerque o que roce nuestras vidas. De un modo lorquiano, todos comprueban que las casas pueden convertirse en nuestra peor pesadilla, y que las llamas prenden siempre con más entusiasmo en nuestras cortinas, nuestras camas, nuestros muebles.

Un libro admirable, espléndidamente trazado y resuelto, que constituye el primer volumen de relatos de Mayte Blasco. Ojalá le sigan muchos.

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