Afirmaba
Friedrich Nietzsche que quien vuelve a los orígenes encuentra siempre
principios nuevos. Y yo he recordado esa sentencia mientras leía los poemas que
acaba de publicar Isabel Soler Luján en su libro Cuentos de un infante sabio
e interesante. Porque la autora, lejos de perseguir una originalidad
convencional, ha querido lograrla por un camino más curioso: el de enfrentarse
a diez historias de don Juan Manuel (contenidas en su obra El conde Lucanor)
y recrearlas en versos actuales, frescos, juguetones, que permitan a los
lectores más jóvenes acceder a las enseñanzas del viejo texto. Y ese vertido en
odres nuevos lo lleva a cabo no solamente por escrito, sino también de forma
oral, porque al finalizar la redacción de cada poema incluye un código QR para
que los lectores la puedan ver y escuchar recitando los versos. ¿Se puede
concebir un espectáculo más completo, más variado, más seductor? Pues sí: las
ilustraciones espléndidas con las que María Torres Signes enriquece y completa
el tomo.
El
resultado final, que ha salido a la luz en el sello Tirano Banderas, contiene
las célebres historias del padre y el hijo que se montaron en un burro, del
cuervo que fue engañado por un zorro para que soltase el queso que llevaba en
el pico, del lazarillo ciego, de la esposa levantisca y de condición brava o
del traje nuevo del emperador, entre otras. Es decir, episodios que don Juan
Manuel inmortalizó en el siglo XIV y que ahora la poeta y especialista en
cuentoterapia Isabel Soler vierte en moldes renovados, idóneos para utilizar en
colegios e institutos.
Estoy convencido de que pueden convertirse en un instrumento didáctico de primer orden para acercar la literatura medieval a los lectores que comienzan su aventura por el mundo de los libros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario