Hay
novelistas que recurren a la Historia (anécdotas, documentos, personajes,
fechas) y que utilizan todo el material recopilado para empedrar o asfaltar sus
obras, impidiendo que por las grietas de esa costra emerjan las flores y
logrando que el lector, más que admiración, experimente asfixia. O, al menos,
se extenúe con los bostezos. Y hay otros novelistas que, empapados de esa misma Historia, se preocupan por ponerla al
servicio de la imaginación, de la fantasía, de la más chispeante creatividad,
para que quienes paseen por las veredas de su libro se sientan mágicamente
transportados a una realidad paralela. Esta última apuesta la desarrolla Care
Santos de forma espléndida en su reciente obra El baile de los muertos (editada por Cross Books).
En ella
nos instala en el convulso siglo XIX que vivió la adolescente reina Isabel II,
hija de Fernando VII, que está a punto de ser obligada a casarse con Francisco
de Asís de Borbón. Reacia a aceptar este matrimonio (Isabel está enamorada de
Antonio de Orleans), la reina solicita la ayuda de sor Patrocinio, una monja de
oscuros poderes e intenciones, que comienza a orquestar un modo para evitarlo.
En ese plan participarán, de un modo directo o indirecto, numerosos personajes
fascinantes: el inteligente Diógenes, que recibe el encargo de exhumar varios
cadáveres célebres de distintos cementerios (entre ellos, los del escritor
Mariano José de Larra y el bandolero Luis Candelas); la joven Lilia, que también
trata de librarse de un matrimonio que le repele; Fidel, un huérfano que está
siempre acompañado por un extraño fantasma que muestra sus mismos rasgos
faciales; y otros más, igual de fascinantes, que irán descubriendo los lectores
de la obra. Además, observaremos perplejos (y espeluznados) el extraño viaje
que una sortija maldita trazará, de mano en mano, hasta el final mismo de la
novela.
Atrevida, sólida en el manejo de las voces narrativas, arquitecta eficaz de un argumento magnético (sociedades secretas, reliquias, milagros, truculencias, emboscadas, traiciones, sorpresas, sustos), Care Santos vuelve a entregarnos una novela de éxito garantizado.