martes, 31 de octubre de 2023

Cartas de un joven Camus

 


Todos tuvimos miedo durante el año 2020. A todos se nos dijo que debíamos encerrarnos en casa, porque era la única forma de protegernos contra un virus terrible, contra el que aún no se conocía tratamiento ni vacuna. Un virus que se cobraba centenares de víctimas cada día y que avanzaba como un atroz jinete del Apocalipsis. Todos cerramos puertas y balcones. Todos escuchábamos el silencio infinito de las calles y estábamos pendientes de las noticias, para ver cómo se iba solucionando una pandemia descomunal de la que, nos dijeron, todos saldríamos mejores. Hubo carteles optimistas en los cristales, para animarnos los unos a los otros. Hubo quienes se hicieron de oro traficando con el miedo, con los tests de las farmacias, con las mascarillas. Hubo quienes propagaron bulos, quienes se hartaron de llorar, quienes se acogieron a cualquier explicación o esperanza. Palabras que no conocíamos (coronavirus, ARN mensajero), personas cuyas existencias ignorábamos (Fernando Simón) y costumbres anómalas (toserse en la sangradura del codo, abrazar a los nietos por la espalda, lavarse las manos con furia neurótica) colonizaron nuestras vidas.

De todo ello fue testigo el joven narrador que protagoniza Cartas de un joven Camus, de Galder Reguera, quien nos va explicando cómo se desarrolla su propio confinamiento, con una hermana pequeña a la que hay que mantener en la más pura inocencia, con un padre infectado, con una madre sobrepasada por los acontecimientos, con un vecino viudo que pasea a su perro y con una chica que le gusta y a la que solamente puede ver cuando sale a aplaudir a los sanitarios o en el momento de sacar la basura, camuflado con guantes, capucha y mascarilla. En casa, aparte del teléfono móvil, están también algunos libros, como La peste, de Albert Camus, o La espuma de los días, de Boris Vian. Y con esas muletas tiene que sobrevivir, sin dejar que el desánimo lo derruya.

Gran libro de Galder Reguera, que nos recuerda cómo fueron aquellos días y que nos retrata con maravillosa precisión los recovecos anímicos de un adolescente que sufre el puñetazo de la adversidad y el miedo.

No se lo pierdan.

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