El peruano
Roberto Valdivia (Lima, 1995) acaba de ver publicada en el sello
Liliputienses su obra EP (Poemas de
Salinger), que contiene todos los elementos esperables en un libro de autor
tan joven: intrepidez en la forma, autobiografismo (real o ficticio),
modernidad temática… Nos explicará, por ejemplo, que su habitación “será el
gran hermano / yo instalé las cámaras”, que desea escribir “poemas que no se
parezcan a absolutamente nada”, que está contemplando una nube que se parece a
Freddy Mercury, que acaricia junto a su amada la idea de elaborar “una lista
larga de escenas de películas clásicas que hemos perdido mientras nos
besábamos” o que a veces siente que se le va a caer la cabeza y que tendrá que
recogerla “como un niño de cuatro años intentando recoger sus canicas del suelo
antes que acaben de rebotar”.
Es decir,
que aquí parece estar habitando un poeta potencialmente interesante.
Pero (y
el “pero” también hay que indicarlo, porque es justo) aún deberá pulir ciertas
carencias gramaticales y ortográficas, que emborronan sus líneas. Acudir a la
fórmula “en base a” (p.20); anotar que “mi cabeza no tiene porque vestirme”
(p.25); equivocar manejos verbales (“pensé que si tú estarías a mi costado”,
p.53); o, en fin, referirse a “nieztche” (p.39) o “sartre y simone beauvier”
(p.58), constituyen chirridos demasiado aparatosos para ser aceptados como
rupturas vanguardistas.
En todo
caso, es evidente que Liliputienses ha realizado una apuesta literaria, y eso
siempre resulta un hecho admirable en el mundo cultural que nos rodea, tan
conservador y tan centrado en las figuras consagradas. Es un detalle que les
honra.
1 comentario:
Cómo todo autor joven aporta frescura y sencillez, aunque esta ultima suele ir acompañada de inexperiencia...apostar por los nuevos talentos siempre tiene mérito.
Besitos 💋💋💋
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