miércoles, 1 de junio de 2022

Espinosa Pardo

 


Tendría yo unos diez u once años cuando, rebuscando en un armario del despacho de mi padre (la infancia y sus “tesoros”), encontré un grupo de ejemplares de la revista Cambio 16. Como no tenía nada mejor que hacer, les eché un vistazo, sin entender nada, pero se me quedaron dos titulares en la memoria, no sé por qué. El primero, “El abrazo de Europa”, donde aparecían Willy Brandt y Felipe González; el segundo, “Independencia elevada al Cubillo”, sobre un líder canario. No conocía a ninguno de los tres personajes, pero con el paso de los años fui obteniendo más informaciones de los dos primeros. Antonio Cubillo, en cambio, se diluyó en la memoria… hasta que Paco López Mengual ha vuelto a traerlo a mi memoria con la edición de su libro Espinosa Pardo (Historia de un confidente), bajo el sello La Fea Burguesía.

He descubierto así la figura misteriosa, trampantójica y sorprendente de José Luis Espinosa Pardo, un hombre que se relacionó (iba a decir que “perteneció”, pero el verbo no resulta exacto, porque una vez acabado el libro comprendes que Espinosa nunca perteneció a ningún sitio, persona o ideología) con el GRAPO, con el PSOE, con el independentismo canario y argelino, con el PCE, con los servicios de inteligencia, con el mundo de la carpintería, con la UGT y con mil ámbitos más. Nunca quieto. Nunca claro. Nunca rectilíneo. Un ser de nieblas y de meandros, que traicionó y fue traicionado, que participó en luchas y extrañas financiaciones ilegales, que viajó por varios países, fue abrazado por líderes de toda condición, y acabó muriendo pobre y solo en un lugar perdido de Murcia, casi nonagenario. Fue (y utilizo las palabras inmejorables de Paco López Mengual) “uno de los supervivientes de la parte más desconocida y mugrienta de la Transición” (pág.185). Y resultaba imposible no escribir una historia sobre él.

En este tomo, fruto de largas investigaciones, entrevistas y rastreos descubrimos esas partes invisibles que nos rodean y que nos empeñamos (por higiene mental) en no investigar: las mentiras y avaricias y traiciones y megalomanías de los políticos, las mezquindades del poder, la pestilencia que expelen las cloacas de todos los Estados. Y descubrimos cómo una persona intrépida, osada y dúctil pudo bracear en ese mar bravío durante años, sobreviviendo a naufragios y oleajes, para terminar llegando a la costa, como Odiseo, envejecido, cubierto de algas y desorientado.

Paco López Mengual elabora un libro que contiene una historia y también la construcción de una historia. Es decir, que vemos no solamente a Espinosa Pardo, sino también al propio Paco, su perseguidor (cortazariano), en capítulos alternos, para ofrecernos un valioso trabajo de documentación y de imaginación que participa de la novela, de la biografía y de la reconstrucción histórica. O, para decirlo con una fórmula contenida en el volumen, “una rocambolesca historia real con todos los ingredientes del género negro” (pág.25).

Desde el punto de vista literario, Espinosa Pardo (Historia de un confidente) es un libro tan entretenido y fascinante como todos los del autor. Desde el punto de vista técnico, creo que el mejor de los suyos.

Imprescindible.

1 comentario:

La Pelipequirroja dijo...

En casa también se guardaban reportajes de Diario 16.
Tengo el lector ideal para este libro.
Besos