lunes, 26 de febrero de 2018

El informe Stein




Leo hoy la breve novela El informe Stein, de José Carlos Llop (Anaya & Mario Muchnik, Madrid, 1995). Y no sé si decir que me ha gustado, o que me ha disgustado. Desde luego, es distinta. Crea una atmósfera peculiar, inconfundible. No sé si Llop escribirá siempre de la misma manera. En todo caso, hay como un tic “javiermariano” que no me termina de convencer, y que consiste en una cierta morosidad concéntrica narrativa, una prosa tartamuda, morosa o autista que lo lleva a incurrir en secuencias como ésta: “Los jueves por la tarde yo no iba al colegio, ninguno de nosotros iba al colegio porque una de las costumbres de los jesuitas era cerrar el jueves por la tarde y no los sábados, como el resto de los colegios. Y los sábados por la tarde todos nosotros íbamos al colegio y el colegio estaba abierto, no como los demás colegios, que permanecían cerrados los sábados por la tarde” (páginas 36-37). Hay que admitir que, estructuralmente, queda cuando menos extraño.
De todas formas, como soy perseverante y no rechazo de plano ninguna prosa al primer intento, es probable que decida acercarme a alguno de sus otros libros.
“El padre Cristino conocía a la perfección a quién iba a suspender la vida, a quién iba a aprobarlo y a quién a darle un notable. Porque el padre Cristino sabía que la vida no regalaba jamás un sobresaliente”. “La lluvia parecía un ejercicio de caligrafía sobre las páginas del aire”.

1 comentario:

La Pelipequirroja del Gato Trotero dijo...

Si es que cuentas las cosas Deuna manera...😌

Besukis 💋💋💋