domingo, 19 de abril de 2020

Hormonautas




Los nautas han sido, en la historia literaria, muy frecuentes: recordemos, por citar algunos ejemplos clásicos, a los argonautas (que buscaban el vellocino de oro allá por la Cólquide), a los astronautas (que aparecen en varios libros de Stanislaw Lem), a los aeronautas (como el que protagonizaba aquella antigua novela breve de Julia de Asensi) y a los autonautas (a quienes Julio Cortázar hizo bogar por las autopistas francesas). Y, desde 2015, la catalana Paz Monserrat Revillo aumentó esa nómina con su obra Hormonautas, un original volumen en el que todos los relatos están vertebrados de alguna manera sobre la acción de las hormonas, esos mensajeros químicos que nos recorren, condicionan y modulan.
En esta sorprendente colección de historias seremos informados sobre los efectos de la prolactina, el cortisol, los estrógenos, los anabolizantes o las feromonas, que circularán por el libro al mismo tiempo que se nos habla de la madre que concurre a un examen mientras deja sus mellizos al cuidado de las abuelas; del dolor terrible que supone siempre la cercanía de una persona tóxica; de la hilarante situación que puede producirse al ingerir la pastilla equivocada; de la esposa que ha disfrutado de todo tipo de amantes utilizando los paseos de su perrita como señuelo erótico; del afamado educador ambiental que pasa de la gloria al más estrepitoso descrédito en apenas seis segundos; de la niña que, para preocupación de sus padres, observa de vez en cuando a un ángel; o de la accidentada forma divertida en que una estudiante española prepara churros anómalos para su familia de acogida norteamericana.
Humor, interesantes reflexiones sobre la condición humana y magníficos retratos de nuestro mundo se van trenzando en estas historias, publicadas con buen ojo por la editorial Nazarí.

2 comentarios:

La Pelipequirroja del Gato Trotero dijo...

Dichosa prolactina, que no subía...😅🥴
Anotado queda, lo sabes.
Besos.

Paz Monserrat Revillo dijo...

¡Mil gracias, Rubén!