jueves, 19 de junio de 2014

La fea burguesía



Hace años escuché a Gonzalo Torrente Ballester en una entrevista televisiva y me agradó que dijese algo políticamente incómodo: que la burguesía era la gozosa responsable y sustentadora del mundo occidental, tal y como hoy lo conocemos; y que, por tanto, el tono peyorativo que se le dedicaba a “lo burgués” se le antojaba un disparate. De ahí que el escritor Miguel Espinosa, tan brillante siempre, tuviese el acierto de dedicarle un libro satírico y mordaz a la “fea” burguesía, que no es la burguesía toda. Ahora, la recién nacida editorial murciana que lleva ese mismo nombre (capitaneada por Francisco Marín, Fernando Fernández y Paco López Mengual), ha abierto su catálogo con una espléndida reedición del citado volumen.
Miguel Espinosa es uno de los grandes autores de la narrativa española del siglo XX, así que continuar difundiendo sus textos y poniéndolos en las manos de los futuros lectores sea una labor tan inteligente como apostólica. Él se dio cuenta, y lo plasmó en este libro inclasificable, de que la burguesía “fea” aunaba las peores excrecencias de las dos clases sociales que la circundan: el pueblo (del que heredaba sus filones de zafiedad y energumenismo) y la clase alta (a quien trataba de emular sus aires de grandeza, con el consiguiente aroma patético que las imitaciones burdas siempre acarrean). El burgués feo no es pueblo, pero tampoco es aristocracia. Es un híbrido descolocado, deshilachado y sin una identidad firme, que se arropa con las adherencias lamentables que escoge sin ton ni son, llevado por la soberbia, el desdén, el afán de dinero y la estulticia. Los personajes de Miguel Espinosa están ahí para mostrar esa evidencia de orden sociológico, que él coloreó con la mejor literatura de su tiempo, llena de elegancia, sarcasmo, retrato cruel y fidedigno y anécdotas imborrables.

La editorial La Fea Burguesía, recordándonos esta obra y volviendo a colocarla en las meses de novedades de las librerías, está haciendo un enorme favor a la cultura española, y regalando una preciosa ocasión para el gozo a los lectores. No hay que pensárselo mucho para hacerse con este volumen: será difícil que ustedes encuentren uno mejor entre los tomos que lo rodean en su librería habitual.

1 comentario:

supersalvajuan dijo...

Apuntada, como no, otra recomendación.